Exóticos - Tánger, la entrada de África
01/07/2012La ciudad de Tánger, ubicada en el extremo norte de Marruecos, y a pocos kilómetros del estrecho de Gibraltar, es una de las urbes más misteriosas del país. La combinación de la cultura europea con la marroquí y las influencias musulmanas hacen que sus calles estén plagadas de tradicionales bazares, encantadores de cobras y vendedores de especias. Te invitamos a conocer más de esta ciudad, dinámica y con sus tradiciones a flor de piel.
Tánger, ubicada en el extremo norte de Marruecos, es una ciudad cuyas raíces y tradiciones están a flor de piel. Grandes mezquitas al borde del océano, mercados donde el regateo es ley y antiguas ruinas históricas son sólo algunas de las atracciones de esta urbe que se encuentra a pocos kilómetros del estrecho de Gibraltar.
Tánger ofrece una mezcla de culturas e influencias dignas de ser admiradas: en sus calles se funden las costumbres musulmanas, con los aromas de los platos y las especias marroquíes, y un oleaje del idioma y el estilo español.
La influencia española se nota tanto en las construcciones más modernas, como en la cantidad de marroquíes residentes en Tánger que hablan español (casi un 50%) además de los idiomas oficiales del país: el árabe clásico y el berebere.
La Medina
Si visitas esta urbe no puedes dejar de visitar el barrio denominado “la Medina”, que es la manera en que designa a los cascos históricos de las ciudades árabes (aunque en ese idioma Medina significa “ciudad”). Conservada en perfecta estado, la Medina de Tánger cuenta con las típicas calles angostas que parecen salidas de una película, mujeres con sus cabellos cubiertos con pañuelos de colores, miradores únicos hacia el mar y los típicos mercados dónde los vendedores persiguen a sus clientes y los incitan a regatear.
Dentro de esta zona antigua, donde también hay casa particulares, está el Zoco Grande, un enorme mercado dónde se encuentran todo tipo de productos como ropa, telas, zapatillas, hortalizas y hasta animales. También allí está la Plaza 9 de abril de 1947, donde se agolpan antiguos y adorables cafés donde sentarse a admirar el estilo de los habitantes de la Merina, al igual que lo hicieron famosos escritores que buscaban inspiración allí.
Mezquitas
Mezquitas son lo que sobra en Tánger, y muchas de ellas pueden ser admiradas por su belleza interna y externa. La mezquita de Sidi Bu Abid, cuenta con un altísimo minarete que se puede ver desde muchos puntos de la ciudad. También tiene un gran monumento rodeado de jardines, donde estpa grabado el discurso de Mohamed V.
Dentro de la Merina y frente a una iglesia católica, se encuentra la Gran Mezquita, que durante su historia fue ocupada por diversas civilizaciones y fue reconstruida en el siglo XIX.
Barrio Marshan
Este barrio es uno de los preferidos por los turistas, gracias a su particular estilo con calles angostas, balcones y flores por doquier. Allí se encuentran cafés icónicos por sus misterios y el peso histórico: el café Hafa y el café París, se decía que en este último se reunían espías de la Segunda Guerra Mundial.
En Marchan se encuentra el Museo Forbes (por el famoso millonario que adoraba la ciudad y fue dueño de casi todo este barrio), que exhibe miles de figuras militares en miniatura que simulan las grandes batallas de la historia.
La ciudad nueva
Pero la ciudad no sólo consta de edificios antiguos, ya que tiene una moderna zona nueva con el Boulevard Pasteur como centro. La arquitectura muestra edificios de los años 30´s, de las más variadas inspiraciones y estilos, y construcciones futuristas de varias decenas de pisos.
El Boulevard Mohammed V es la calle tapizada por tiendas de lujo, grandes bancos y corporaciones internacionales. En la ciudad nueva se puede visitar el Hotel Minzah, que encanta a sus visitantes con su patio andaluz, sus salones árabes, fuentes y jardines que albergaron a personajes famosos como Winston Churchill, Rita Hayworth y Bernardo Bertolucci.
De noche, el paseo marítimo es el recorrido obligado para todo aquel que quiera tomar un trago o bailar en las discotecas. Allí los jóvenes locales se mezclan con los turistas para disfrutar de una noche de diversión.
Historia, leyendas y cultura milenaria, eso es lo que encontrarás en Tánger